D.W-A Vol.4
Capítulo II (L) – Futuro, nuevos horizontes
Ya no recordaba a que día de la semana nos encontrábamos, viviendo una rutina en espera del alta médica…
Gracias a las visitas constantes de Aina y sus locas ideas se volvía llevadero en adición a tolerar de mejor manera el aburrimiento.
“Por cierto, ¿Ahora cuál sería el plan o camino a seguir?”
“Nos restaba una sede a la cual dirigirnos. Sin embargo, el resto del grupo ya debe de estar sembrando caos en ese sitio…”
“¡Ya veo! En ese caso, vamos a dar una vuelta al hospital Alexis”
“¿Te parezco encontrarme en condiciones?”
Las risas burlescas de Un Plaga y Kai tras esa propuesta fueron instantáneas, dado una pierna se encontraba inmovilizada.
“¡Well boy!, tu por lo menos caminas a medias, medio cojo. Nosotros pasamos como momias parlantes si no prestan atención”
“Querrás decir semi parlantes. Uno puede hablar, pero el otro debe escribir”
“¡Good Point!”
Decidí levantarme poco a poco hasta dar con el borde de la camilla, señalé una silla de ruedas cercana la cual sería de utilidad.
Nuestra compañera, tras llevarla hasta donde me ubicaba, procedió a asistir en el traspaso de un lado a otro. Fue difícil realizar aquella transición ahora como paciente, siendo que ya estaba acostumbrado ubicarme desde la perspectiva del tratante…
“Si claro, muy gracioso Kai… más tarde hablaremos del tema, verdad no puedes aún”
“¡¡¡JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA!!! ¡V-Vamos a hablar más tarde! ¡¡¡Esto me supera sin dudas!!!”
Ella no podía parar de reírse de la situación, tirada en el piso se revolcaba mientras sujetaba con ambas manos su abdomen.
De haber realizado aquel comentario poco antes, ahora me encontraría en la misma posición, con la diferencia radical de estar adolorido a más no poder.
“En fin, mejor pongamos pies en marcha o acabaré arrepintiéndome”
“¡¡¡P-Pies en marcha y se encuentra enyesado!!! ¡¡¡Acaso quieres matarme de risa!!!”
Bien, en lugar de esperar, intenté coordinar la propulsión generada por mi brazo sano a través de la rueda con mi pierna intacta realizando apoyo.
Intentando avanzar con cierta dificultad hasta pasar la puerta de la habitación virando en pleno pasillo, fue donde alguien llegó y me tapo los ojos llegando por la espalda.
“¿Otra vez con tus bromas peli rosa loca?”
“Jijiji”
Esas risas… seguro ya estaba alucinando después de tanta acción o tal vez a causa de algún medicamento suministrado en el suero.
“¿Ya te rindes hermano?”
“¡¿C-Chloe?!”
“¡YEI!
Se abalanzó alegre en cuanto dije su nombre. La pequeña niña risueña estaba justo aquí, era realmente ella.
Notaba a primera vista el cambio de estatura al quedar frente a frente desde nuestra despedida, sumado ahora a su cabello el cual se encontraba hasta mitad de su espalda. Hasta cambió el estilo de vestimenta.
Tenerla aquí me alegro bastante e incluso mejoraron aspectos propios como el simple hecho de sonreír.
“Si tu estas aquí, significa que…”
“¡Viajamos todos juntos camino a la ciudad!”
De fondo se sumaban las risas estrepitosas de Amanda, haciendo alusión al estado actual de Kai recalcando su expresión; Acaben con mi sufrimiento.
Si ellas dos están acá, ¿Dónde se encontraría el resto?, esperaba no se sean malas noticias.
“Por cierto Chloe, ¿Y el resto del grupo?”
“Los demás están de compras, cuando llegamos a casa estaba vacío el refrigerador y apestaba bastante. ¡Llegue a recordar ese día cuando abrimos una puerta con un olor asqueroso!”
“¡Vaya día fue ese! ¡Jajaja! ...”
“¿Sucede algo hermano?”
“Bienvenidos a casa, los extrañe”
Luego de esas últimas palabras, su siguiente abrazo fue diferente. Era cálido, acogedor e incluso emanaba aquel deseo de reencuentro.
Comprendía bastante por qué se comportaba de esa manera, ahora volveríamos a estar juntos viajando.
Escondía su cabeza sin alzar el rostro, no quería que la viera sollozando a pesar de percibirse.
“¿Te sientes mejor?”
“Si…”
“Vamos por algo para beber, ¿Qué dices?”
“¡Si!”
Intentando avanzar con dificultad recorríamos los pasillos del hospital, donde ocasionalmente la niña por iniciativa se ubicaba tras la silla de ruedas para empujar.
Ello hasta la intervención de una enfermera, quien asistió con suma amabilidad el camino restante hasta llegar a una especie de jardín donde había máquinas expendedoras.
“Cuando necesiten volver me pueden llamar, debo ir a revisar unas fichas de pacientes en una de las oficinas. Pueden de igual manera preguntar preguntarle a la señorita a cargo por mi”
“Gracias por su apoyo, la iremos a buscar en cuanto terminemos”
“¡Muchas gracias, señorita!”
“¡Eres una niña muy educada! Debo felicitar a tu padre por haberte enseñado bien, esperemos se recupere pronto para que vuelvan a casa juntos”
“¡Entendido!”
Esos impulsos de decirle que no éramos padre e hija eran fuertes, aunque en la condición actual deseaba estar tranquilo en verdad.
Tras despedirnos, Chloe miraba de forma media burlesca esbozando su inocente sonrisa carente de maldad.
“¡Déjame ayudarte! ¡Pa-pá!”
“Vaya niña traviesa saliste”
“Jijiji”
La altura no acabo siendo impedimento gracias a la distribución de botones, eligiendo jugo de manzana para ella y un café para mí, los cuales bebimos bajo la sombra de un árbol.
Siendo una hermosa mañana soleada, brisa fresca conjuntamente al canto de varias aves tornaban toda esa paz en una especie de mini paraíso.
Comparado a lo ocurrido antes de caer inconsciente, daba a pensar que fue solo un pésimo sueño.
“Veo que alguien se quedó dormida”
“¡N-No estoy dormida! S-Solo estaba relajada”
“Mmm… Ya veo”
“Tu sueles cerrar tus ojos haciendo siempre lo mismo”
“¿Oh? Vaya, vaya, me acabas de tomar por sorpresa”
“¡Enserio te sorprendí! ¡Yey!”
Es normal verlos imitar a figuras paternales o mayores por los cuales sientes confianza y cercanía. Ahora lo recordaba, primera vez donde adopta un comportamiento de alguien más.
“¿Porque siempre acabas hecho un desastre? Menudo hombre saliste”
“¡¡Hermana Yuuki!!”
“¡Bienvenida! ¡Es bueno volver a verte Yuu!”
Se sintió aquel leve nerviosismo, posterior a ello volvió a su actitud alegre habitual respondiendo con un grato; la llegue.
“Por cierto, ¿Que le paso a tu brazo y pierna?”
“Larga historia, una aberración enorme producto del brote en la ciudad”
“Debió ser doloroso”
“No me lo recuerdes… ¿Y qué hay de tu cabello junto a tu ojo?”
“Ah… sobre eso, no encontré tintura del color hasta volver al original, por lo otro, me confié solo un poco, pero muy poquito”
“¡¿Te encuentras bien de la visión?!”
“Corrí con suerte, solo fue la piel. Aun así, g-gracias por preocuparte”
La invité a tomar asiento en la banca donde se encontraba Chloe, continuamos contando las desventuras correspondientes hasta este reencuentro.
Durante unas dos horas habremos platicado previo a retornar a la habitación donde fuimos internados, en ello, la pequeña recordó ir a avisarle a aquella enfermera que contábamos con un apoyo ahora.
“¿Te duelen mucho hermano?”
“Ahora no siento nada, aunque, es molesto estar limitado de esta manera”
“Tu tranquilo, puedes contar con nosotras. Logramos frenar un grupo de reanimados descontrolados sin mucho esfuerzo, ¿Verdad hermanita?”
“¡Fue genial! ¡Muchas personas agradecieron el haberlos ayudado! ¡Hasta el gigante daba mucho miedo, pero fuimos valientes!”
Oírla expresarse de esa manera tan tierna le alegraría el día a cualquiera, a pesar del daño general expuesto, ella todavía era la pequeña e inocente niña desde ese encuentro.
Continúo contando cada cosa hasta llegar a la habitación… vaya caos se armaba en ausencia de uno…
“¡Ayuda Alexis! Me colocaron este letrero además no quieren me dejar ponerme de pie…”
“Bien profesora Amanda, dime que hiciste ahora”
“Solo estaba fastidiando a Kai como todos los días…”
Respiré profundo tratando de procesar sus palabras, siendo también Aina la otra castigada en el mismo rincón…
Preferimos omitir todo compromiso hasta percatarnos de la presencia de un médico quien me estaba buscando.
“Buenas tardes, joven Alexis, me alegra ver tiene buenas amistades con usted”
“Muchas gracias a usted, según las enfermeras, logró estabilizarme al poco rato de ser ingresado”
“No hay de que, eso sí debo informarte de buenas noticias. Tu pierna se encuentra bien, salvo si nos fijamos en la rodilla tras haber sido luxada”
“Porque algo me dice la tendremos complicada”
“De hecho, es lo contrario, la cirugía tras tu ingreso y cierta falta de movilidad ayudaron a recuperar las estructuras generales. Ahora es posible comenzar a caminar con cuidado y el brazo… es fractura”
“No tengo quejas la verdad, entre ambas situaciones, el volver a caminar era mi prioridad. Con ello, lo demás me encargaré de atenderlo”
El buen hombre ya contaba varios años a cuestas, estaba al tanto que volvió tras su retiro en ayuda de personas afectadas sin hacer distinción del problema.
Su decisión se debió a la necesidad presente en la comunidad, un ejemplo de vocación si debiese mencionarse.
“Ustedes tres son afortunados, los presentes preguntaban siempre por su estado de salud. En otras noticias, uno se va con alta hoy y el otro chico le toca ser extubado”
“¡Oulala! ¡Ahora tendremos charlas interesantes!”
Nos anunciaron ya mismo podría volver hoy a casa, se me recetaron medicamentos junto a controles cada cierto tiempo. También prestaron un bastón el cual utilizaré de apoyo.
“Espero no sea mucha la molestia, pero nos quedaremos acompañando a los internados. ¿Algún inconveniente Taiyo?”
“Sabes te acompañaré, esta demás la pregunta”
“¡Bien!”
“Tengo planes, ¡Esta noche prepárense los cuatro!”
“Prepara los ánimos Aina, Amanda va enserio…”
Previo a retirarnos, entregaron las llaves del departamento avisando encontrarse listo. Asistidos por personal del lugar, decidieron trasladarnos en un furgón para pacientes.
Quien estuvo al volante, fue la enfermera de esta mañana. Poco antes de bajarnos, nos enteramos curiosamente de que la chica era nieta de aquel médico.
“Nunca creí llegar a decir esto, pero… Extrañaba este lugar”
Tomando asiento en la sala de estar entre los tres, decidimos relajarnos mientras nos preparábamos ya para decidir sobre el futuro.
“Si te soy sincera, después de la última sede y la información obtenida, lograron crear una muestra experimental”
“Debes estar bromeando… quizás ello explica las ojeras de Amanda”
“Estas pensativo, ¿Sucede algo?”
“Una vez solucionada la catástrofe o controlada en su defecto, planeaba intentar abrirme paso hasta Europa”
“¡¿Estás seguro de lo que dices Al?! ¡No sabemos nada sobre el mundo a excepción de esos registros!”
“Tengo una familia a la cual encontrar, pero tampoco planeo dejarlas a ustedes dos a su propia suerte”
Ella comenzó a reírse al prestar atención a mis disparatadas ideas. Primero entre preocupada y/o exaltada para acabar al otro extremo de las cosas…
A pesar de ello, acabó declarando con determinación que me acompañaría en ese camino. Siguiendo esas mismas líneas, la pequeña respondió incorporándose.
“Vaya par de hermanitas, a este ritmo tendré que cobrarle a Raiko independiente su estado actual”
“¡Entonces vamos a conocer tu casa hermano!”
“Mmm… podría decirse, bueno, lo que queda de ella”
“¡¡Pido dormir contigo!! ¡Vamos a jugar video juegos hasta tarde!”
Tal inocencia hacia olvidar los problemas, independiente su origen, hasta consiguió sacarme una sonrisa.
“¿Alguien dijo?”
“¡Ir hasta el viejo continente!”
Desde el interior del baño se asomaba el hermano de las dos señoritas presentes y de una habitación otra persona cuyo rostro me era familiar.
“Siento conocerte de alguna parte, ¡Espera! ¿H. L?”
“Correcto, estaba en el equipo contrario a Amanda. Permíteme presentarme como es debido, soy Fukui Alexis del departamento de investigaciones o lo que queda de ello”
“¡Debe ser una broma!” (x2)
“Ustedes dos deberían relajarse, no hay nada extraordinario en mi presentación”
“¡Tenemos el mismo nombre! ¡Eso ya enreda las cosas!”
“¡Se supone te llamabas Ryza! ¡A qué viene el cambio repentino!”
“Ah… Lo lamento, recuperé más fragmentos de mi memoria durante las ultimas noches y tuve una crisis existencial”
A este paso viviré envuelto en caos… no existía un solo día tranquilo con ellos, en fin… al menos esto hará llevadero el viaje hasta casa.
“Cuento con todo el arsenal infernal a mi disposición, bastará chasquear los dedos si deseo limpiar los terrenos apocalípticos”
“Sin dudas tu hermano no ha cambiado…”
“Lo lamento por ello, ya son años así”
Mi doble presentó un mapa enorme del mundo con gran cantidad de marcas, colores y anotaciones.
Explicaba al detalle cierto comportamiento de los muertos, tomando de referencia los documentos de Kai. Bajo ciertos ajustes en compañía de variables geográficas propias de cada área, logró ajustar las rutas y sectores perdidos.
“Si planean viajar hasta Europa, les tengo noticias interesantes”
Postura determinada, sonrisa confiada en adición a declarar ser parte de la travesía fueron las claves de lo venidero.
Autor: Ronin
Coautor: Byleth