España en el 2008, por otro lado, ganó una Eurocopa, dos años después un Mundial, dos años después otra Eurocopa, y fue subcampeón de la Confederaciones de Brasil. Tuvo tropiezos sí, pero son más sus logros y su constancia. Al menos esa generación cumplió.
México hoy por hoy es potencia mundial juvenil. Dos campeonatos sub-17, un subcampeonato en la mencionada categoría, y un tercer lugar sub-20. La medalla de oro no fue ninguna casualidad, porque se ha trabajado mucho en esas divisiones. Y con los jugadores que hoy tienen, el próximo año seguramente harán algo histórico en Chile.
Francia después del desastroso mundial en Sudáfrica tuvo una reestructuración, que los llevó a brillar en este Mundial. Incluso Italia actualmente es subcampeón de Europa luego del papelazo tristísimo del 2010.
Alemania después del "fracaso" de 1998 (quedarse en cuartos), invirtió y trabajó en jóvenes promesas que hoy en día son estrellas de la selección. El resultado es que, sí, no han ganado ningún Mundial en lo que va del siglo, pero han permanecido SIEMPRE entre los 4 mejores del mundo. Hablamos de constancia, los equipos constantes son los que el mundo más recuerda.
Grecia, por otro lado, no volvió a brillar desde entonces. Es lo que diferencia a los camper de los que son buenos en lo que hacen y tienen oficio.