Aitaro
THE MONSTER
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Capítulo 35: Batalla acuática.
Totalmente llena de barro, Sarai llegó a Ciudad Pradera. Rápidamente, se duchó y se puso una camiseta sin mangas y con cuello de color rosa y blanco, un pantaloncillo de color amarillo con una correa, medias blancas con zapatos rosas y fue al gimnasio de Mananti, un hombre grande y robusto, con una musculatura notable destacando sus bíceps y sus pectorales. Su vestimenta en general recordaba a la de un luchador de lucha libre. Llevaba en la cara una máscara azul con unas crestas blancas en los laterales. Tenía poco pelo en la cabeza tenía unas patillas perfiladas en forma de punta hacia arriba. Vestía además unos pantalones de neopreno azules y unas botas naranjas. Su torso estaba desnudo, lo que permitía ver sus músculos.
-¡Soy Mananti el destructor! ¿Cuántas medallas tienes, pequeña?- Se presentó y preguntó y Sarai le enseñó su estuche-Pareces un digno rival ¿Conoces las reglas?-Le preguntó.
-Creo que sí. Es a tres pokémon y solo el aspirante puede hacer cambios ¿No?-
-Eso es ¡Que empiece el cooombate!- Rugió el líder y sacó a gyarados y Sarai a krabby.
-¡Mordisco!- Rugió de nuevo Mananti y mordió al cangrejo.
-¡Protección, krabby!- El cangrejo endureció su acuerpo y rompió los dientes de gyarados.
-¡No! ¡Ahora tendrás que ir al dentista!- Exclamó el líder y le dijo a su pokémon que usara furia dragón en forma de llamas, recibiendo el ataque y cayendo al agua.
-¡Azote!- Dijo Mananti y gyarados lanzó un coletazo.
-¡Agarre!- Decidió Sarai y krabby cogió la cola. Luego, siguiendo las órdenes de Sarai estampó al pokémon agua contra el suelo y las paredes.
-¡Ahora pisotón!- Ordenó la chica y el pisotón del crustáceo derrotó a la serpiente. Tras él salió quagsire.
-¡Tumba rocas!- Ordenó el destructor y lanzó piedras que krabby destruyó. Luego fue petrificado, pero se liberó cortando la piedra.
-¡Ahora garra metal!- El rival recibió los tenazazos y bostezó. Luego escuchó a Sarai diciéndole que agarrara al quagsire y el pokémon anfibio fue presa de sus pinzas.
-¡Ahora tiralo contra el techo!- Krabby obedeció y quagsire contraataacó con un coletazo, krabby agarró la cola y lo mandó contra la pared, pero frenó antes de poder estamparse
-¡Rayo hielo!- Krabby fue congelado y Sarai tuvo que sacar a otro Pokémon.
-¡Ve, Chespin!- Tras lanzar la pokéball y salir el pokémon ordenó golpear con latigazos al quagsire hasta debilitarlo. Entonces sacó a floatzel, quién le mordió, llenándose la boca de espinas.
-¡Ahora látigo cepa!- Dijo Sarai con voz fuerte y floatzel fue azotado hasta ser derrotado.
-¡Floatzel no puede seguir! Sarai y Chespin ganan- Decidió el árbitro y Sarai lloró de alegría mientras abrazaba al pokémon planta.
-Aquí tienes tú medalla ciénaga- Dijo dándole una insignia en forma de lago circular con juncos grises. Luego fue al centro pokémon y tras ducharse y cenar, terminó el día.
Totalmente llena de barro, Sarai llegó a Ciudad Pradera. Rápidamente, se duchó y se puso una camiseta sin mangas y con cuello de color rosa y blanco, un pantaloncillo de color amarillo con una correa, medias blancas con zapatos rosas y fue al gimnasio de Mananti, un hombre grande y robusto, con una musculatura notable destacando sus bíceps y sus pectorales. Su vestimenta en general recordaba a la de un luchador de lucha libre. Llevaba en la cara una máscara azul con unas crestas blancas en los laterales. Tenía poco pelo en la cabeza tenía unas patillas perfiladas en forma de punta hacia arriba. Vestía además unos pantalones de neopreno azules y unas botas naranjas. Su torso estaba desnudo, lo que permitía ver sus músculos.
-¡Soy Mananti el destructor! ¿Cuántas medallas tienes, pequeña?- Se presentó y preguntó y Sarai le enseñó su estuche-Pareces un digno rival ¿Conoces las reglas?-Le preguntó.
-Creo que sí. Es a tres pokémon y solo el aspirante puede hacer cambios ¿No?-
-Eso es ¡Que empiece el cooombate!- Rugió el líder y sacó a gyarados y Sarai a krabby.
-¡Mordisco!- Rugió de nuevo Mananti y mordió al cangrejo.
-¡Protección, krabby!- El cangrejo endureció su acuerpo y rompió los dientes de gyarados.
-¡No! ¡Ahora tendrás que ir al dentista!- Exclamó el líder y le dijo a su pokémon que usara furia dragón en forma de llamas, recibiendo el ataque y cayendo al agua.
-¡Azote!- Dijo Mananti y gyarados lanzó un coletazo.
-¡Agarre!- Decidió Sarai y krabby cogió la cola. Luego, siguiendo las órdenes de Sarai estampó al pokémon agua contra el suelo y las paredes.
-¡Ahora pisotón!- Ordenó la chica y el pisotón del crustáceo derrotó a la serpiente. Tras él salió quagsire.
-¡Tumba rocas!- Ordenó el destructor y lanzó piedras que krabby destruyó. Luego fue petrificado, pero se liberó cortando la piedra.
-¡Ahora garra metal!- El rival recibió los tenazazos y bostezó. Luego escuchó a Sarai diciéndole que agarrara al quagsire y el pokémon anfibio fue presa de sus pinzas.
-¡Ahora tiralo contra el techo!- Krabby obedeció y quagsire contraataacó con un coletazo, krabby agarró la cola y lo mandó contra la pared, pero frenó antes de poder estamparse
-¡Rayo hielo!- Krabby fue congelado y Sarai tuvo que sacar a otro Pokémon.
-¡Ve, Chespin!- Tras lanzar la pokéball y salir el pokémon ordenó golpear con latigazos al quagsire hasta debilitarlo. Entonces sacó a floatzel, quién le mordió, llenándose la boca de espinas.
-¡Ahora látigo cepa!- Dijo Sarai con voz fuerte y floatzel fue azotado hasta ser derrotado.
-¡Floatzel no puede seguir! Sarai y Chespin ganan- Decidió el árbitro y Sarai lloró de alegría mientras abrazaba al pokémon planta.
-Aquí tienes tú medalla ciénaga- Dijo dándole una insignia en forma de lago circular con juncos grises. Luego fue al centro pokémon y tras ducharse y cenar, terminó el día.
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